Esto es un secuestro

Esta mañana, al levantarme, me he notado un poco raro. Me había crecido el pelo desorbitadamente, estilo afro para más inri. Además tenía un poblado bigote, cosa extraña porque suelo ser barbilampiño. Al abrir el armario no he encontrado más que cazadoras de pana y pantalones de campana. Mi ordenador se había convertido en un Altair 8800, mi televisor era un mastodonte en blanco y negro, y habían desaparecido mi teléfono móvil y mi cámara digital.

La explicación a esta kafkiana situación es sencilla: resulta que hemos retrocedido en el tiempo, aunque no lo creais ahora estamos en 1977. ¿Quereis pruebas? Mirad las noticias y vereis que ha ocurrido algo que resultaría imposible en el año 2007: Un juez decreta el secuestro de la revista El Jueves por una portada ofensiva para la familia real. La portada en cuestión es esta:

Poca cosa puedo añadir yo a los ríos de tinta (electrónica) que ya han sido vertidos con respecto a este tema. Sólo añadiré un par de reflexiones personales:

1) Parece quedar demostrado lo que muchos ya barruntábamos: la clase jurídica española, al igual que la clase política, no sabe lo que es internet. "Ordeno la destrucción del molde del dibujo y así impido su difusión." Lo dicho: 1977 en todo su apogeo.

2) Si el señor Borbón así lo desea, me ofrezco a ocupar su puesto. A mí no me importaría vivir en un palacio con la vida (la mía y la de mis hijos) más que resuelta, siendo mi único trabajo viajar por todo el mundo dando discursos que no he escrito yo, si el único inconveniente es que de vez en cuando alguien dibuje una caricatura mía.

3) Ya tengo ganas de ver la portada del próximo número. :-)

Con respecto al tema monárquico, yo siempre he sido más bien "agnóstico": si hay rey, bien; y si no, también. Pero esto me ha tocado bastante los colchones, y por culpa de un juez tocaidems, los pobres españolitos hemos quedado, de cara a la galería internacional, a la altura de los descerebrados que se ofendieron por las viñetas de Mahoma.

En fin, pido disculpas por una entrada tan seria. La próxima vez volverán las chorradas, los chascarrillos y por supuesto, Kaito.